
Walter Trout, un bluesman que sabe lo que se hace. No sólo porque haya cursado una dilatada carrera de guitarrista a sueldo de estrellas de la talla de John Lee Hooker, John Mayall o bandas como Cannet Heat. Con rumbo y banda propios desde los noventa, Trout se ha ganado un lugar en el panorama del blues-rock gracias a un gran repertorio de emocionantes canciones y la eficaz ejecutoria de sus actuaciones en vivo.
También sabe lo que se dice, y lo escribe con coraje. Hace falta haber estado al otro lado de las vías para hablar así. Puede imaginarlo, intuirlo, tal vez paseó atolondrado y sin rumbo bajo la lluvia alguna vez. Walter pasó por ello, y tiene la suficiente autoridad sobre seis cuerdas y un mástil para abrir paso a su mensaje entre nieblas y tormentas.
Un buen punto de partida para conocer a Walter Trout puede ser su álbum The Outsider, El Forastero, publicado en 2008. Inequívocamente, el espectacular tema que lo abre deja a las claras no sólo su calidad como compositor e intérprete, sino también la personalidad y talante del guitarrista.
Directo y honesto, su blues empareja el melancólico desgarro de la decepción con notas de electrizante esperanza. Es memoria, paño de lágrimas, dolor y gloria en la derrota. Es fé, inspiración, resolución y pugna por la supervivencia.
Tal como es. Lo vive y lo cuenta Walter: ¡Bienvenidos a la Raza Humana!.
"" He sido amado y odiado,
elogiado y vilipendiado.
He sido acusado y vindicado,
y salido adelante con determinación.
He superado un sinfín de pruebas,
deshaciéndome de mi orgullo.
Alguna vez he dicho la verdad.
Otras veces he mentido.
Y cuando me quedo a solas conmigo mismo,
en un espacio frío y vacío,
entonces una voz interior me dice: "!Bienvenido,
bienvenido a la raza humana,
bienvenido a la raza humana!"
Me han hecho daño y herido.
He estado abajo e hincado las rodillas,
orando por el perdón
de mis enemigos.
A veces, ha habido grandes ilusiones
que han cegado y nublado mis ojos
hasta perderme y desorientarme.
Siempre acabé por alcanzar la salida.
Cuando me quedo a solas conmigo mismo,
con lágrimas en la cara,
entonces suena una voz interior que dice: "!bienvenido,
bienvenido a la raza humana!"
¡Bienvenido,
Bienvenido!
¡¡ Bienvenido a la raza humana !!
He estado en la cárcel y en el limbo.
He estado en la cima y en lo profundo de un pozo.
Justo de lo que he estado huyendo
supongo que nunca lo sabré.
He sido encerrado y expuesto
para que todos me pudiesen ver.
Bienvenido y despreciado,
supongo que así será siempre.
Escondido en las sombras.
Sólo, llorando sobre mi rostro.
Oyendo una voz dentro de mí,
diciendo: "!bienvenido
a la raza humana!"
¡Bienvenido a la raza humana!
Dice: "¡bienvenido,
bienvenido a la raza humana! ""
(Traducción adaptada de la canción "Welcome To The Human Race".)
Ahora, si ha recuperado el aliento está invitado a dejar su impresión en los comentarios. Sería de agradecer.