Cat-1

Cat-1

Cat-2

Cat-2

Cat-3

Cat-4

Lo más reciente de Música





"" No puedo esperar para volver a casa. 
Donde el sol es siempre agradable y cálido. 

No puedo esperar para volver a casa. 
Donde el sol es siempre agradable y cálido. 

Tienes que saber que me estoy helando aquí.
Y que el viento aullador me cala los huesos con gran escalofrío. 

Oh debes saber, cómo tirité hasta quedarme dormido, anoche. 
Este frío no me deja vivir. 
Fue entonces que me desperté y me di cuenta de que 
¡este no es lugar para mí!. 

Y no puedo, no puedo esperar para volver a casa. 
Donde el sol siempre es agradable y cálido. 

Entérate que me estoy helando aquí. 
Y que el viento aullador me cala los huesos con gran escalofrío.

Me uní a algunos buenos viejos amigos
que me llevaron lejos por un instante,
dejando atrás este sitio, este frío callejón, nena. 
Al lugar cálido que me podía esperar. 

Oh, no puedo, no puedo esperar para volver a casa. 
Donde el sol siempre es agradable y cálido.


Estoy tan feliz de reencontrarlos a todos, 
que ese viejo y maldito escalofrío se ha ido. ""
              

(Traducción adaptada del tema "Nice & Warm" de Tab Benoit.)









Bueno, dejé mi trabajo en el autolavado y una nota de despedida a mi madre.
Cuando el sol se puso salí de Kingston con mi guitarra bajo el abrigo.
Hice autostop hasta Memphis, cogí una habitación en el Y.M.C.A.
y durante tres semanas me pateé los clubes buscando algún sitio donde tocar.
Pensé que mi repertorio les volvería locos, pero nadie quería contratar un guitarrista.

Casi me muero de hambre en Memphis, me había quedado sin dinero ni suerte.
Realicé un viaje a Macon, Georgia, en un camión cargado de gallinas.
Luego hice dedo hasta Panamá City y empecé a ver algunos bares nocturnos.
Esperaba ganarme un dólar tocando, pero siempre me soltaban lo mismo:
"Aquí no tenemos sitio para un guitarrista".

Dormí en la jungla de los vagabundos, vagué por mil kilómetros de camino.
Acabé en Mobile, Alabama, frente a un club llamado "Big Jack's".
Un pequeño cuarteto ensayaba, así que cogí mi guitarra y me uní a ellos.
Les enseñé cómo podía sonar una banda con un guitarrista rítmico. 
"!Muéstraselo, hijo!"

Si alguna vez viajas hasta el oceáno, pásate por Mobile

y no te pierdas un club llamado "Jack's" si tienes un poco de tiempo que matar.
Solo tienes que seguir a la multitud y acabarás en la pista de baile,
disfrutando con el mejor quinteto que hay en todo el Golfo de México.
Adivina quien es el líder de ese quinteto. ¿No lo sabes?
Bueno, nunca hubieras dicho que es un pequeño guitarrista.


                                      Traducción adaptada del tema 'Guitar Man' (1967) de Jerry Reed 





Elvis abrió con este número su Especial Comeback en la cadena de televisión NBC, el 3 de diciembre de 1968. Emergiendo desde la oscuridad y encañonado por un potente foco frente a la penumbra posterior, la escena destacaba una imagen de desdén y rebeldía, aludiendo a imágenes pasadas y tiempos de juventud, mostrando a un Elvis que aún conservaba grandes dosis de atractivo y provocación. La pieza enmarcó la transición a "Guitar Man" desde la introducción de "Trouble", con un telón de fondo similar al de "Jailhouse Rock", con bailarines masculinos encasillados en celdas. 

El tema "Guitar Man" había sido escrito por Jerry Reed Hubbard ese mismo 1968. El simpático Jerry Reed (1937-2008) fue cantante de country, compositor y actor en más de una docena de películas. Interpretando papeles cómicos y caracterizando a joviales palurdos sureños, es reconocible co-protagonista de la saga sobre camioneros protagonizada por Burt Reynolds iniciada con "Los Caraduras", amén de otras actuaciones en cine y televisión. 

Respecto a la grabación por Elvis de su canción, comentó: "Yo estaba en la pesca del río Cumberland, cuando recibí una llamada de Felton Jarvis (entonces productor de Elvis en RCA). Jarvis me dijo: "Elvis está aquí mismo. Hemos estado tratando de grabar "Guitar Man" durante todo el día pero Elvis quiere que suene como sonaba en su disco". Así que le dije: "Bueno, si quieres que suene así, vas tener que llevarme allí a tocar la guitarra". Y ese fue el principio de una gran amistad entre genios.

Ahora pulse sobre su nombre si quiere saber más sobre el bueno de Jerry Reed




"How Will the Wolf Survive?" ("¿Cómo Sobrevivirá el lobo?") es el gran álbum de debut de Los Lobos. En 1989 fue clasificado por la revista Rolling Stone en el puesto 30 de la lista de los 100 mejores álbumes de la década de 1980. En 2003, el álbum ocupó el puesto número 461 en la lista de la revista con los 500 mejores álbumes de todos los tiempos.

"How Will the Wolf Survive?" fue el álbum en que Los Lobos enseñaron lo mucho que tenían que decir como compositores, sobre todo con "A Matter of Time" y el corte que presta su nombre al título, dos canciones que ofrecieron una mirada conmovedora y compasiva hacia la vida de los inmigrantes ilegales en Estados Unidos. Si en su anterior trabajo, "...And A Time To Dance", Los Lobos se mostraron como una banda para bailar, en "How Will the Wolf Survive?" demostraron que eran una gran banda de baile y mucho más.

Integrados por Louie Pérez en la batería, guitarra y requinto, David Hidalgo a la voz, acordeón y guitarra, César Rosas en la voz, la guitarra y la mandolina, y Conrad Lozano en el bajo y el guitarrón, Los Lobos juegan hábilmente con la exquisita exuberancia de la Frontera, una fusión de sonidos con la mejor herencia cultural de ambos lados, y una búsqueda íntima de la banda para conservar su mestizaje mexicano-americano, al tiempo que intentaban abrirse paso en la industria del disco.

Los Lobos habían formado parte de varias bandas amateurs de Los Ángeles antes de interesarse por la música de raíz, comprar algunos instrumentos tradicionales mexicanos en las casas de empeño y aprender la música norteña de sus ancestros. En 1983 añadieron además a un saxofonista llamado Steve Berlin (que pronto se uniría a la banda) y grabaron un EP llamado "...And A Time To Dance". Vendieron sólo 50.000 copias, pero se ganaron el favor de la crítica y pudieron comprarse una destartalada Dodge con la que se recorrieron los Estados Unidos y fueron cogiendo tablas. A la vuelta, David Hidalgo y Louis Pérez trabajaron en las canciones de su primer álbum de larga duración, fruto del cual son piezas como "Don't Worry Baby".






"How Will the Wolf Survive?" fue concebido en el verano de 1984 de la mano de T-Bone Burnett, que había coproducido su EP anterior. Las pistas básicas fueron grabadas en el estudio Capitol en Los Ángeles, con doblajes y voz hecha en un estudio-garaje de un amigo de Burnett. Las pistas adicionales fueron editadas en los estudios de Warner Bros., porque "cuando parecía que mejor lo estábamos haciendo, algo salía mal", según contó Pérez.

Cuando el trabajo estuvo casi terminado, el título del álbum surgió de la forma más casual. "How Will the Wolf Survive?" fue inspirado por un documental de National Geographic titulado "¿Cómo Sobrevivirá el Lobo?", que los miembros de la banda acogieron como lema por la relación con su propia lucha por el éxito en los Estados Unidos, manteniendo sus raíces mexicanas. Louis Pérez recordó: "Era como nuestro grupo, nuestra historia: ¿Cual es esta bestia, este animal que las compañías discográficas no pueden entender?. ¿Vamos a tener la oportunidad de hacerlo o no?".

"How Will the Wolf Survive?" es el mejor trabajo de una banda que aprendió a tocar todo tipo de estilos manteniendo su propia personalidad musical en el proceso. El álbum oscila desde el rock clásico ("Don't Worry Baby") y la potencia del R & B ("I Got Loaded") a las baladas country-blues con acento ("A Matter of Time") o temas tradicionales mexicanos ("Serenata Norteña"), siempre con grandes dosis de buen gusto, madurez e inteligencia musical. Breve pero intenso, el disco sienta las bases del brillante futuro del grupo: lograron esa facilidad inédita de pasar de la polka norteña a un rock and roll ejecutado con el alma, de la manera más ágil y divertida.

En definitiva, una obra clave en la discografía de la mejor banda hispana de Los Ángeles, el disco que catapultó a Los Lobos como la banda fronteriza de referencia, "How Will the Wolf Survive?". ¿Logrará sobrevivir el Lobo?









Corría 1987, días de inmortalidad y noches de color en la Era del Vinilo. Como para toda una generación, el Rock & Roll copaba todos los sentidos. Un día de tantos, mejor una noche, THE DEL LORDS se cruzaron en el camino. Hoy, su semblanza y el hallazgo de su último trabajo merecen la atención de este blog y la suya.

Como decía, fue en uno de aquellos lances nocturnos que THE DEL LORDS hicieron saltar nuestras alarmas entre el martillo y el yunque. Sonidos garajeros, contundentes y resolutivos, pero sobre todo rabiosamente frescos. ¡Tan frescos como una crujiente lechuga!. ¿Una muestra? "Judas Kiss" fue un fenómeno mundial gracias también a este vídeo.






DEL LORDS no son fronterizos al uso sino urbanitas resabiados de la Gran Manzana, con un ojo puesto en 'Dixie' y otro en California. Unos venían del punk y otros del rock urbano. Alguien les etiquetó como los 'Beach Boys' de la Costa Este y nos da que se quedó corto. Con más acierto les encuadraron luego en el denominado nuevo rock americano, junto a otras bandas de semejante ralea que andando el tiempo volcarían sus influencias en un nuevo género: la americana music. Desde los míticos ochenta hasta ayer por la tarde, ellos han estado ahí todo este largo tiempo, como un tarro de mermelada de frambuesa. A un 'pop' se destapan las esencias del rock & roll y el blues, del country y el folk, con un denominador común: rock prístino, melodioso y elegante.








Scott Kempner, Manny Caiati, Eric Ambel y Frank Funaro son los culpables de esta eficiente receta rockera, absorbente, pegadiza y clamorosamente intensa. Arrancaron allá por 1984 con "FRONTIER DAYS", donde mostraron sus credenciales en temas que llegarían a clásicos del grupo como "Get Tough" o "Heaven". La voz solista de Scott Kempner y la pulcritud guitarrística de Eric Ambel se convirtieron en enseña de la banda. Les conocimos a fondo en su segundo trabajo "JOHNNY COMES MARCHING HOME", para perderles la pista tras "BASED A TRUE STORY", allá por 1988. Hasta hoy.

Como muchos buenos grupos que triunfaron a finales de los 80, en plena fiebre rockanrrolera, Los DEL LORDS no tuvieron suerte en sus trabajos posteriores ni cosecharon repercusión significativa en los medios. Como muchos de aquellos, los neoyorkinos encontraron refugio en el tramado de actuaciones en garitos de mala muerte y esperaron que escampase sin dejar de perseverar en el rock. Así hasta "ELVIS CLUB", fresquito y recién salido del tarro este 2013, donde Funaro, Kempner y Ambel recuperan el fulgor emocionante de los tiempos en que invitaban a levantar la birra sobre la barra en la emoción que significa disfrutar de los acordes de una banda de Rock' n' Roll, sin artificio, pegatinas ni campaña de marketing. Solo rock, una espita de sones conectando y expresando otra forma de sentir y comunicarnos.


Si comparte esta sensibilidad no deje pasar un momento más sin escuchar y dejarse llevar por la música de THE DEL LORDS. Canciones como "When the Drugs Kick In", "All of My Life", "Chicks, Man" o "Letter (Unmailed)" le resultarán mil veces más convincentes que cuanto pueda esforzarme en contarle de ellas. Reconocerá enseguida o descubrirá por primera vez el tono de Scott Kempner, comprobará cómo Eric Ambel se emplea a fondo en temas del calibre de "Me and the Lord Blues", "Flying" y la versión de Neil Young, "Southern Pacific".

Ha pasado el tiempo. Todos lucimos bastante más viejos; algunos más sabios, otros más desencantados. Los DEL-LORDS, con la habitual frescura marca de la casa, destapada en cada tema de éste magnífico y reluciente "ELVIS CLUB", se ocuparán de que unos y otros pasen a reconectarse al rock, se agiten en la emoción y muevan sus caderas como si esta noche se subiesen de nuevo las persianas del viejo local.


Ahora, escuche sin salir del blog y al completo el álbum "ELVIS CLUB" de THE DEL LORDS.








Los que siguen este blog saben bien de su poco apego por la actualidad. Sin embargo, hay ocasiones en que no es posible desdeñar el cruce con el pasado.

La Creedence Clearwater Revival lleva tiempo clamando por ocupar un espacio por aquí. Hoy por fin lo tendrán, al hilo del nuevo disco de John Fogerty, con el breve esbozo del descubrimiento de ambas figuras y nuestra fe en el country rock.
Sí, amigos, creo en la CREEDENCE. Hoy toca revival.


Para los despistados decir que John Fogerty es uno de los grandes compositores de rock americano de todos los tiempos, y la Creedence Clearwater Revival, la banda de rock más emblemático de los últimos 60' y principios de los 70', uno de los mejores grupos de toda la historia de la música popular, incluído en el Salón de la Fama del Rock desde 1993. Un estandarte genuinamente americano de libertad y rebeldía generacional asociado con la tradición y el clasicismo rockeros, una idea de América asimilada generosamente en bandas sonoras de películas como 'Apocalypse Now', 'La Jungla de Cristal', 'Forrest Gump' o 'El Gran Lebowsky', entre otras.






A mis efectos, conocí a John Fogerty de la mano de mi amigo Jess, que vivía al fondo de la calle. En el tiempo de aquella adolescencia, Jess podía ser tomado solo por gracioso y ocurrente, alguien sin cuyo concurso no había fiesta ni algarada, pero era un tipo tímido, con muchas lecturas, íntegro y perspicaz, y eso hacía que todos le tuviéramos en cuenta. El caso es que Jesse, que se pretendía más sudista que las barbas de Lee, se presentó un día con un radiocasette por el Instituto haciendo gracietas como acostumbraba. De las entrañas del cacharro brotaban añejos sonidos de guitarras eléctricas y una voz hippilonga que no me dejaron indiferente. Aquel tipo que daba vueltas en la cinta era John Fogerty, me ilustró Jesse. Sonaba 'Big Train To Memphis', según supe más tarde. Yo no tardé dos minutos en subirme al expreso y secundar a mi amigo en su ronda. Tiempo después, creo recordar que el convoy a Memphis descarriló un día de tanto dar vueltas en el reproductor de mi casa. Hablando de trenes, ¿no oyen acercarse el 'Especial de Medianoche'?






Años más tarde volví a celebrar a Fogerty sin reconocerle. Los días empezaron a correr algo más deprisa, en medio de la calma y la incertidumbre. Johnny continuaba girando una y mil veces en las cassettes como líder de la gran Creedence Crearwater Revival, pero entonces sonaba a bordo del coche de Randy, otro pájaro a tener en cuenta. Aquel rock brumoso, de pantano y gasolinera, aquella melodía con efluvios a yerba y pantalones de campana, aquel sonido metálico, la voz desgarrada del mismo Fogerty, como salida de lo profundo de un intrincado alambique clandestino... esa era la sintonía que daba alas al pequeño utilitario de Randy o anunciaba nuestra llegada a bares y tabernas. Nos acompañaba una aureola de bendita libertad, despreocupación y rudeza rockera. Hizo calor aquel verano del 91, pero no pasamos sed.

La Creedence no dejó de sonar en adelante, concienzuda y pertinazmente, sugiriendo historias, ambientando bocetos y proyectos. Ahora los reconocía en la banda sonora que tantas veces acompañaba en la pantalla, como ya habían pasado a formar parte de la mía, solo que sin chopper ni guerrera del Vietnam. Tampoco hacía falta. Llegué a aprenderme cada nota y estribillo de 'Green River', 'Fortunate Son', 'Have you ever seen the rain?', 'Proud Mary', 'Born On The Bayou', 'Suzie Q', 'Lookin' Out My Back Door' o 'Run Through the Jungle'. ¿Conocen ésta?. Dicen que cuando los Creedence acabaron a tiros, acusaron al fenómeno de Johnny Fogerty de agenciársela como 'The Old Man Down the Road', lo que devino en nuevos pleitos. Ambas son geniales pero yo prefiero al 'Viejo'.






El caso es que anuncian que vuelve John Fogerty, a propósito de su 68 cumpleaños. El alma de la Creedence Crearwater Revival publicará a finales de Mayo de 2013 su nuevo álbum, 'Wrote A Song For Everyone', una recopilación de famosos temas del grupo y algunos inéditos. Lleva toda la vida haciéndolo, a los clásicos no les hace falta reinventarse. En esta ocasión contará con la colaboración de algunas figuras de la música Americana actual, como Brad Paisley, Alan Jackson, Miranda Lambert y Keith Urban, entre otros. El disco se llama como el tema que la CCR incluyó en 1969 en el tercer álbum de la banda, 'Green River'.

No cabe duda que será un gran recopilatorio, lo tiene todo hecho. La vieja Creedence volverá por sus fueros y una legión de veteranos rockers dejaremos suspiritos en el aire al escuchar a John Fogerty retumbar desde el fondo del alambique mientras conducimos, hacemos la compra o chequeamos el desempleo. Será todo un éxito si logra incorporar nuevos creyentes, lo que es seguro es que ya nunca abandonarán la compañía del Agua Clara. Una fe que nunca es tarde para abordar, reeditar y revivir, con la excusa que se prefiera. 







"" Temprano por la mañana, dando vueltas,
me metí algo de cocaína y disparé a mi mujer. 
Fui directo a casa y me metí en la cama. 
Puse a mi amada 44 debajo de la almohada.

Desperté a la mañana siguiente y cogí el arma. 
Tomé un poco de cocaína y escapé lejos.
Hice un buena fuga pero corro muy lento.
Me atraparon allá por Juárez, México.

De madrugada en la celda, tomando unas píldoras, 

se presentó el sheriff de Jerichó Hill. 
Dijo: "Willy Lee, tu nombre no es Jack Brown. 
¡Eres el sucio bastardo que mató a su mujer!". 

Le respondí: 
"Sí, oh sí, mi nombre es Willy Lee. 
Si tiene una orden de arresto léame mis derechos. 
La maté porque me llegó a molestar. 
¡Creí que era su 'papi' y tenía cinco más!".

Cuando me arrestaron vestía de negro. 

Me subieron a un tren y me llevaron de vuelta. 
No tenía amigos que pagasen mi fianza. 
...¡Patearon fuerte mi seco cadáver 
en aquella cárcel del condado!.

A la mañana siguiente, como a las nueve y media, 

vi venir al sheriff por el corredor. 
Tosió, como aclarándose la garganta y me dijo: 
"¡Vamos, sucio demonio, al tribunal del distrito!".

En la Sala de Justicia mi juicio comenzó, 

dejándome en manos de doce hombres honestos. 
Justo antes de empezar 
vi al pequeño juez mirando alrededor.

Tras cinco minutos entró el jurado, 

un hombre sostenía el veredicto en su mano derecha. 
El veredicto fue leído: "Asesinato en primer grado". 
Y yo imploré: "¡Diosito, Diosito ...ten piedad de mi!".

El juez sonrió mientras levantaba su pluma: 

"99 años en la Prisión de Folsom, ¡99 años enterrado allí!". 
No puedo olvidar el día que le disparé a esa mala perra. 
"Vamos, escucháme... ¡¡Deja a un lado la cocaína y del whiskey despídete!!". ""

                                                   'Cocaine Blues', traducción adaptada de la versión más popular.







"Cocaine Blues" es una versión western-swing de la canción escrita por T.J. 'Red' Arnall, a su vez una adaptación del tema tradicional "Little Sadie". Esta canción fue grabada originalmente por W.A. Nichol Western Aces (vocalista de la banda de 'Red' Arnall) en el sello S & G, probablemente en 1947, y por Roy Hogsed and the Rainbow Riders en el mismo año, en la Universal Recordings de Hollywood, California. La grabación de Hogsed alcanzó el número 15 en las listas de country de 1948. 

Con frecuencia a Arnall también se le atribuye otra versión de "Cocaine Blues", la escrita y grabada por Billy Hughes, también en 1947. La música es similar, sin embargo, la letra de éste varía considerablemente respecto a la de Arnall. Por ejemplo, Hughes habla del 'chico de la cocaína', no de 'Willy Lee', entre otras difererencias de lugares y situaciones. Termina de esta manera:


                   "...antes de que usted se convierta en un adicto y quede sonado, 

                                eche un vistazo a lo que hizo con el chico de cocaína".

Aquella modificación inauguraría una serie de versiones y adaptaciones de la letra que los diferentes artistas irían acoplando a su repertorio. Una de las notables y exitosas fue la de Johnny Cash, quien interpretó el tema en su famoso concierto en la Prisión de Folsom. Allí nombró a "Folsom" en lugar del "San Quentin" original, por cortesía hacia su público de convictos, pero incorporó desde entonces esa mención en el tema, una situación que interpretaría Joaquin Phoenix en la película biográfica sobre Cash"Walk the Line"


La lista de artistas que han grabado la canción comprende a Hank Thompson (1959), Led Zeppelin (1971), George Thorogood and The Destroyers (1978), Keith Richards (1993),  Hank Williams III (1999), Bob Dylan (1960, 1989–2006) o Merle Haggard (2011), entre otros.


Precisamente uno de ellos son el grupo femenino Las Taradas, cuya actuación nos ilustra, una orquesta argentina que realiza versiones de la música de los años 40's, 50's, rancheras, música hispanoamericana..., con gran elegancia, desenfado, magnífico sonido y un apabullante show en vivo. Sus referencias, aquí: https://www.facebook.com/lastaradas






Oigo el tren llegando, está doblando la curva 
...y no he visto el brillo del sol desde no sé cuando. 
Estoy clavado en la Prisión de Folsom y el tiempo pasa, lentamente... 
Pero ese tren sigue rodando hacia San Antonio.

Cuando era sólo un niño mi mamá me dijo:
 "hijo, se siempre un buen chico, !no juegues nunca con pistolas!". 
Pero disparé a un hombre en Reno, solo para verle morir... 
Cuando oigo el silbido sonando, bajo la cabeza y lloro.

Bueno..., si me liberasen de esta prisión, si el tren de la vía fuese mío..., 
apuesto a que me animaría un poco, alejándome por la línea.
Lejos de la Prisión de Folsom, allí es donde quiero estar. 
Y dejaría que ese silbido solitario hiciera volar lejos mi tristeza.


                                                               "Folsom Prison Blues" Johnny Cash (1955)


"Folsom Prison Blues" es una canción de Johnny Cash, lanzada como single un 15 de Diciembre del año 1955 e incluída en su disco debut de 1957, Johnny Cash with His Hot and Blue Guitar.

La historia cuenta que Cash escribió esta canción en el año 1952 mientras hacía su servicio militar en una base del ejercito estadounidense en Alemania Occidental. La inspiración para esta canción le surgió al ver la película "Inside the Walls of Folsom Prison" junto a sus compañeros de instrucción militar. Para músicalizar su texto, Cash tomó prestado (o robó??) los acordes de una canción del compositor estadounidense Gordon Jenkins llamada "Crescent City Blues". Tras varios intentos y sesiones de grabación, Cash decidió usar exactamente la misma melodía que aquella canción y simplemente se molestó en cambiarle la letra. 

Dentro de ella, lo más impactante se encuentra en la frase que dice el protagonista de la historia: "I shot a man in Reno just to watch him die", la cual resume su contexto y catadura moral. Sobre esta famosa frase, Cash mencionó en la revista Rolling Stones que la escribió después de "pensar y pensar en la peor razón para matar a una persona". Con esa idea en mente, Cash logró crear una canción que mezcla de manera muy particular el country, sobre todo con la entonación, y la esencia del blues, con el sonido cadencioso de una locomotora..., junto a la trágica historia de un condenado a cadena perpetua. Country, blues... !acelera la máquina Johnny y tendremos rock & roll!.

"Folsom Prison Blues" fue grabada el 30 de Julio de 1955 en los míticos estudios del sello Sun Records de Memphis, y en Diciembre de ese año, lanzada como single sin incluír a Jenkins en los créditos. En 1967 Cash fue demandado por Jenkins, y tras varias negociaciones e idas y venidas a los tribunales, el "hombre de negro" tuvo que pagar 100.000$ por derechos de autor, además de incluír a Jenkins en los créditos de la canción.


"Folsom Prison Blues" tuvo su reválida en las listas de éxito cuando fue lanzada como single en el año 1968, en una nueva versión grabada en el histórico concierto que Cash diera en la Prisión Estatal de Folsom, California. A partir de ese momento se convirtió en una canción muy popular, pasando a ser una pieza fundamental del repertorio del artista.

Sobre el concierto y el álbum a que dio lugar encontrarán más información aquí:
http://es.wikipedia.org/wiki/At_Folsom_Prison  

Con el soporte de:
http://detrasdelacancion.blogspot.com.es                                                                                                       

Cat-5

Cat-5

Cat-6

Cat-6